Procesionarias del pino



Por enero o febrero, hay años que incluso antes, comienzan a aparecer estas orugas que pueden llegar a ser mortales para los perros.

Se le llaman orugas procesionarias (porque suelen ir unas detrás de otras, como en una procesión), o del pino. Antiguamente se encontraban en las zonas de pinares, pero pueden vivir en abetos, y cipreses. De todas maneras he visto cantidades de ellas en descampados donde solo nacen hierbajos y no existen arboles, así que supongo que están cambiando su forma de vida.
Son orugas peligrosas por las reacciones alérgicas que pueden dar en personas y en animales.

El pelo urticante de la oruga se clava primero en la piel actuando como un arpón que contiene una ampolla de tóxico que provoca la liberación de histamina por parte del animal y consecuentemente la reacción alérgica.

En animales domésticos, por ejemplo, animales curiosos como los cachorros de perro (los gatos son más cautos), son peligrosas las orugas de la Procesionaria del pino al chupar o tocar, incluso tragar esta hilera en movimiento o a través de un nido que se haya caído, ya que contiene pelos urticantes. Síntomas: inflamación de labios, boca y cabeza en general. He tenido que tratar perros cuyas cabezas eran el doble de su tamaño. El animal intenta rascarse, llegando a meterse las patas en la boca, babeando exageradamente.
Si ha contactado con la oruga con la lengua, en dicha zona se produce una necrosis que puede provocar la caída de dicho trozo de lengua, de verdad, creedme.
El mayor peligro existe cuando se ve involucrada la laringe, produciéndose la inflamación, que conlleva a la muerte del animal por asfixia si no se le practica una traqueotomía de urgencia.

Por favor, evitad pasear a vuestro perro por estas zonas, y vigilad a los niños, porque dan esas mismas reacciones en humanos.